Ansiedad académica

Muchos estudiantes presentan altos niveles de ansiedad asociados al rendimiento académico e instancias de evaluación. En algunos casos, incluso hace que la persona se sienta “bloqueada” para desenvolverse en estas instancias, interfiriendo en el área académica y en otras áreas de la vida.
En mi experiencia con la atención de estudiantes, he visto que la ansiedad suele asociarse a significados sobre el rendimiento académico. Ideas provenientes del entorno social y personas significativas; así como, desde ideas que han sido internalizadas. Estas ideas suelen tener en común que sitúan al rendimiento académico, como el medio para confirmar la autoeficacia personal, lo que pone en riesgo la autoestima de la persona.
Frente al problema se suele recurrir a conductas con el objetivo de calmar la ansiedad y que en muchos casos pueden mantener o aumentar el problema. Una de las más conocidas es la evitación o postergación de las actividades académicas, la popular “procastinación”, esta podría interpretarse de forma en que no se están desarrollando las actividades académicas por falta de motivación, en lugar de confirmar que es por falta de capacidad, impactando en la percepción de valía personal.
Estas conductas de evitación también se han visto relacionadas a la ansiedad en contextos sociales, ya que la ansiedad tiende a empujar a la persona a esconder su expresión personal, para reducir la posibilidad de ser descubierta una equivocación y ser juzgado en base a esto.
Se propone entonces explorar estos significados personales asociados al estudio y ver cómo podrían reorientarse de manera que permita favorecer la seguridad frente al proceso de aprendizaje y su bienestar emocional.
Ps. Karen Andía